Frozen Day


Por más que lo quiso evadir
el desastre era inminente,
hacía unos segundos
se sentía feliz...distraida
pero en ese instante
perdió el aliento,
sus manos temblaban;
diástole le recordó rápidamente
todo lo bello que había sido,
sístole le hizo comprender
que ahora todo era amargura.
Era él...
el fantasma del amor,
de un amor que pudo haber sido mucho
pero que al final
resultó ser un cuento mal narrado
con un triste desenlace.

Ese fantasma pasó
ella esperaba al menos
una ausente mirada;
pero el llevaba su cabeza gacha
y su vista clavada en el asfalto
causó en la mujer
un profundo dolor...
ese mismo dolor
que la ha hecho escribir
estas alejadas y desconsoladas lineas...

2 Huellas:

javicg dijo...

No tengo palabras, realmente sentido el texto. Suerte con ello!

Un saludo.

Anónimo dijo...

maravillosa crónica en verso, Julieth. Digna de tu sensibilidad.

Un abrazo.